¡Hola Geeks!
Hoy vamos a hacer un postre que ya es geek por si mismo, no le hace falta decoración.
¿Quien de vosotros cuando era pequeño y veía Doraemon (los que lo vierais), no deseaba comerse un Dorayaki?
Yo, había tardes que hubiera matado al mismísimo Doremon por arrebatarle uno de las manos jajajaja; es que el tío se ponía las botas y se los comía con unas ganas que no era normales. ¿O no?
Bueno, pues se acabó soñar que merendamos Dorayakis, o comprar los Bollycaos Dokyo, os voy a dar la auténtica receta para que los hagáis en casa.